Este pasado marzo, en camino a Hong Kong, tuve una escala no planificada de más de 10 horas en Houston. Aparte de salir a dar una vuelta en el centro de la ciudad logré entrar al United Club, una sala VIP exclusiva para pasajeros de esta aerolínea, en este aeropuerto, que estén volando en business, tengan status en Star Alliance o cuenten con ciertas tarjetas de crédito de categoría élite.
Mi amigo Joel tuvo la cortesía de regalarme un day pass, por lo que ingresé a este lugar para almorzar, tomarme algo y descansar antes de, literalmente, dirigirme al otro lado del mundo. Así es el lounge de United Airlines en Houston Intercontinental.
El aeropuerto de Houston es masivo, entre los 15 más transitados de los EE. UU, y uno de los hubs más grandes de la aerolínea. Por ello, hay varias de estas salas en las diferentes terminales. En mi caso, accedí a la que estaba más cerca de la puerta de embarque de mi próximo vuelo. Para ingresar, tuve que mostrarle un código QR a la encargada, quien no pudo ser más amable y hasta me regaló unos lifesavers de menta.
Entré al club a eso de las 14:00 y la concurrencia era moderada. La sala tiene espacios para socializar con cómodas sillas enfrentadas y grandes ventanas para hacer spotting, que permiten ver cómo se mueve el tráfico aéreo.
Además, cuenta con mesas para servirse algo del buffet; un bar que está muy bien; salas privadas para reunirse o trabajar, y un área de descanso con sillas tipo playa, donde no se puede hablar. El Wi-Fi es veloz y hay personal que se encarga de limpiar las mesas o reponer los alimentos periódicamente. Los baños no tienen ducha, aunque supongo que ese es un servicio más Premium, que no todos los lounges ofrecen.
En vista de la hora, empecé por el buffet, que era una barra de tacos, para que los prepares a tu gusto. Es la primera vez que veo algo así en un lounge y me encantó. También ofrecían wraps listos vegetarianos o de pollo.
Para quienes solo quieren un snack ligero, se puede optar por nachos con salsa; pretzels en miniatura; trail mix; canguil sabor a Oreo, o una mezcla de quesos, jamones y galletas de sal. El área cuenta con tres máquinas de café y, lo mejor de todo, una máquina de Coca Cola Freestyle, que permite crear más de 165 opciones de sabores. Estaba con buen apetito por lo que me preparé unos tacos, escogí un par de wraps y probé el canguil de Oreo.
Aproveché la barra para pedir una cerveza Modelo (la que más me gusta) y me serví algo del trail mix, mientras observaba el tráfico aéreo. El lounge se iba llenando paulatinamente y, cuando volví del baño, ya estaba a reventar. Perdí mi mesa y me tocó sentarme en la barra a cargar el celular un poco y hacer algo de people watching antes de dirigirme a la sala de espera.
He tenido la buena fortuna de conocer algunos lounges VIP alrededor del mundo y, debo decir que el United Club es uno de los mejores. Desde la barra de tacos a la máquina freestyle, este espacio contó con tantas cosas inesperadas que me parecieron geniales. Aparte de esto, la amabilidad del personal y la atmósfera tranquila de la sala te permiten un buen descanso antes de abordar un vuelo, mejor aún si es de larga distancia. Si hay la posibilidad de ingresar, en verdad lo recomiendo.
