Fecha: 5 – 10 – 2023
Ruta: UIO – PTY – MEX
Vuelos: CM 158/ CM 194
Asientos: 21 A/ 22A
Nave: Boeing 737 800
Tenía unas millas Connectmiles de Copa que estaban por caducar y debía usarlas antes de que acabe el año, suficientes para un boleto saver hacia una serie de destinos en las Américas. Estuve hace unos meses en los EE. UU, por lo que volver no era una prioridad. He ido varias veces a México en años recientes, pero no he estado en la CDMX desde antes de la pandemia, por lo que, para mí era, sin duda, la mejor elección. Es una de mis ciudades favoritas y regresar siempre es bueno.
Para un boleto ida y vuelta en tarifa saver tan solo se necesitan 25 000 millas y pagar impuestos. Se puede hacer el canje desde la web y el pago es con Visa, MasterCard o Diners Club únicamente.
24 horas antes traté de hacer el check in desde la app y no sé qué pasaba, pero me rechazaba en el último paso. Lo traté desde la web y estuvo bien.
El día del vuelo estuve en el aeropuerto con un poco más de hora y media de anticipación. La terminal estaba increíblemente ocupada con los vuelos de Iberia a Madrid, Latam y Avianca a Bogotá, además del mío a Panamá. El counter de Copa tenía una concurrencia media, pero han habilitado nuevamente la fila del web check in lo que está muy bien. Lo que no está tan bien es la obra de remodelación en el área, que entorpece la circulación de la gente y además es tan ruidosa que complica las interacciones con los tripulantes de tierra.
El trámite de migración y seguridad estuvo considerablemente demorado, por lo que permanecí un poco menos de una hora en la sala VIP. Me encanta cuando tienen sushi y cuando la estación de sándwiches está operativa, como fue el caso en esta ocasión. También tienen buena comida caliente.
Quería tomarme un cóctel en el bar, pero el abordaje estaba por iniciar. No tenía que haberme preocupado, a la final empezó casi una hora tarde.
UIO – PTY
El 737 – 800 que me tocó estaba con la cabina renovada. Los asientos tienen un nuevo forro de cuerina y los overhead bins una nueva señalización más legible. Esta aeronave tenía también IFE personal con estrenos más recientes de los disponibles hace unos meses cuando volé esta misma ruta y puertos USB.
Con unos minutos en el aire empezó el servicio. Es más de lo mismo: un paquete de nachos, uno de galletas (las han mejorado) y bebidas. Tampoco dan audífonos. El IFE tiene 95 películas y 50 capítulos de series
Pase el tiempo viéndolo y hojeando la revista, que es bastante buena y en verdad aprecio que la sigan publicando. Es un vuelo tan corto, de poco más de una hora, y lo he tomado tantas veces, que la verdad no hay mucho que decir.
El aterrizaje me sorprendió de lo brusco que fue y al llegar a la manga los tripulantes se demoraron como 15 minutos en abrir la puerta. Los pasajeros con conexiones más cortas que la mía estaban en verdad frustrados y, en mi caso, cuando llegué a la puerta de embarque del siguiente vuelo, ya estaban en la última llamada. Fui uno de los últimos en abordar.
PTY – MEX
No sé si el avión que me tocó en este tramo fue más moderno o antiguo que el anterior. La cabina, asientos y overhead bins son iguales, pero no tiene pantallas y solamente un enchufe universal en la parte de abajo. Sin embargo, tiene un QR para abrir el IFE en los dispositivos personales.
El despegue fue sorpresivamente a tiempo. Ya en el aire inicié el IFE y funcionó bien, con exactamente las mismas opciones de contenido y el mapa de vuelo tiene un feature bastante bueno donde te informan sobre los lugares que estás sobrevolando. Me encantó ese detalle.
Con un par de horas en el aire, para mi gran sorpresa, pasaron un servicio completo de comida. Le pregunté a la tripulante y me indicó que ahora lo hacen solamente en vuelos de más de tres horas. Las opciones eran carne con pan de maíz o tallarín con pollo. Opte por la carne y me pareció adecuada como comida de aerolínea y mucho mejor que el servicio del vuelo anterior. También venía con un pedazo de pastel de naranja, pero sin ensalada ni pan. En fin.
Seguí viendo el IFE el resto del vuelo y aterrizamos 15 minutos antes de la hora de llegada, a eso de la medianoche.
He realizado el trayecto hacia la CDMX en Copa, vía Panamá, cuatro veces en cuatro años y, a pesar de todo, es básicamente lo mismo. La aerolínea tiene buenas cosas y su producto economy es, increíblemente, uno de los mejores en la región. La tarifa saver para redención de millas te permite hasta seleccionar asientos y llevar una maleta en bodega, beneficios que prácticamente todas las otras aerolíneas ahora cobran aparte. Inclusive Copa lo hace si compras su tarifa más baja, por lo que parece un gran detalle que conserven estos servicios, recompensando la lealtad de los pasajeros.
Además, su programa Connectmiles es todavía increíblemente beneficioso, otorgando millas según distancia volada y no dinero gastado o familia tarifaria. Por otro lado, la tabla de redención que manejan es una de las mejores. En verdad espero que sigan así, son detalles como estos los que, para mí, la hacen la mejor opción para entrar a un programa de lealtad o buscar status en una aerolínea.