Una cosa que me encanta de España y Europa en general es lo espectacularmente bien conectada que está y lo fácil que es hacer una excursión rápida a las afueras de las ciudades. Todo vale la pena conocer y, en unas cuantas horas o menos, te puedes encontrar en los pueblos europeos medievales más encantadores. En este caso, hice un paseo de día a Girona.
La ciudad es sumamente pintoresca y uno de los mejores daytrips en Cataluña. Una escapada rápida desde Barcelona es de lo más fácil, rápido y nada costoso. En años recientes, ha ganado popularidad por ser una de las locaciones donde filmaron Game Of Thrones. La catedral fue parte de King’s Landing en la temporada 6 y otras áreas representaron a Braavos. He sido un fan de la serie por años, por lo que esto era algo que no me podía perder.
Para llegar tomé el tren de cercanías que sale desde Sants Estació y pagué 17€ por el trayecto ida y vuelta, el cual toma apenas 1h20. La ciudad no es muy grande y un día es más que suficiente para recorrer sus calles, apreciar su casco histórico y todo lo que ofrece.
Hice el paseo con mi hermana un martes durante las vacaciones de invierno. Esperaba que las áreas turísticas estén abarrotadas y las temperaturas heladas, pero no fue el caso. La concurrencia de visitantes era mínima y el clima estuvo sumamente agradable, lo que mejoró la experiencia significativamente. Me encanta cuando tengo estos destinos populares prácticamente solo para mí.
La estación de tren está algo alejada del centro, pero se puede llegar a pie a los puentes del río Oñar en unos minutos. Esta es, tal vez, la imagen más representativa de la ciudad, con las casas colgantes de colores reflejándose en el agua. Es increíblemente encantador y un lugar perfecto para sacar cientos de fotos, sobre todo a lo que cae la tarde, con la puesta del sol.
Creo que lo que más me gustó de Girona fueron sus hermosas calles empedradas, sus callejones estrechos, lo impecablemente bien conservada que está para ser una ciudad fundada en tiempos romanos, y lo caminable que es.
La catedral es la edificación más imponente de todo el centro y ofrece unas espectaculares vistas panorámicas. Pensamos entrar, pero cobran 7€ por el ingreso, lo que me parece algo elevado y un poco injusto que te cobren por entrar a un templo religioso.
Nos quedamos hasta entrada la noche, cuando prendieron las calles con luces de Navidad y el clima se puso más frío. Estuvimos de vuelta en Barcelona a eso de las 21:00. Hacer esta excursión es sumamente sencillo y un gran plan para conocer más de Cataluña en un día o cambiar de ambiente si estás en la gran ciudad.
Vi varios tours guiados que ofrecen una experiencia similar, pero cobran casi el triple y te obligan a seguir un itinerario estricto y más limitado. No me parece necesario contratar un servicio de ese tipo. Con un poco de planificación e investigación, se puede gastar mucho menos, tener más libertad y una visita más satisfactoria.
