FECHA: 10 – 4 – 2021
RUTA: LAX – LAS
VUELO: AA 2785
ASIENTO: 21D
NAVE: Airbus A321
Hice un viaje a los EEUU este pasado abril el cual, originalmente, era hacia Los Ángeles. En vista de que muchos de sus sitios turísticos no estaban operativos o con acceso limitado por la pandemia, me vi obligado a modificar el destino final hacia Las Vegas. La ciudad estaba con la gran mayoría de sus atractivos abiertos, por lo que la elección era obvia. Este fue el último tramo de mi viaje, un trayecto corto, de apenas 37 minutos, desde LAX hacia McCarran. Cómo este vuelo lo hice en otra reserva, tiene su propio post.
Llegue de Miami a Los Ángeles con la hora y tenía apenas 1h 45 minutos para recoger la maleta y registrarla para este vuelo. Fue increíblemente frustrante desembarcar de un 777 – 300 para darme cuenta que las maletas todavía no empezaban a circular por el carrusel.
Esperé más de media hora para que empiecen a salir, lo que obviamente me molestó y preocupó, pero a la final todo funcionó. A la hora de entregar y pagar la maleta en el counter ($30 no incluidos en el precio del ticket doméstico) no me encontré con nada de fila y todo el trámite, además del de seguridad fue veloz. Por ello, tuve cerca de 45 minutos en la terminal para comer algo y hacer spotting.
Para mi buena fortuna, el vuelo no fue tan lleno y el abordaje fue rápido. Los tripulantes de tierra no hicieron ningún llamado por lo que, si no estabas pendiente, te quedabas. Esta fue mi primera vez volando en un A321 y se me hizo bastante más cómodo que el MAX 8. Cada asiento tiene un puerto USB y el IFE solo disponible en los dispositivos personales. Me parece tan curioso que en la distribución de los asientos haya un baño en la mitad de la cabina.
Antes del despegue el piloto indicó que el vuelo iba a ser algo turbulento y, debido a la corta duración, pidió a los tripulantes que permanezcan sentados durante todo el trayecto. No hubo servicio de ningún tipo. La verdad no sentí nada de turbulencia hasta el aterrizaje. Fue un recorrido extremadamente corto y agradable, viendo el atardecer en el desierto.
El Aeropuerto McCarran de Las Vegas en verdad es como ninguno otro, con tragamonedas de casino distribuidos por las terminales, carteles brillantes y luces de neón. Te pone de humor para lo que está por venir. Sin embargo, algo frustrante es la falta de alternativas convenientes de transporte no tan costoso hacia el Strip. La única forma de movilizarse es en taxi o en apps de servicios de transporte como Uber (hay un área designada en el estacionamiento para pedirlo, pero es un desastre, los conductores cancelan el viaje repetidamente y la tarifa aumenta con el segundo). Por ello, la única opción viable si no alquilas un auto es un taxi.
Con todo, este último tramo estuvo ok. Para una ruta tan corta, la verdad no me parece que hay mucha diferencia entre una aerolínea legacy como American o cualquier alternativa low cost. Después de 17 horas de viaje, debo decir que este fue el recorrido más tranquilo.
