Trip Reports

Madrid (MAD) a Lisboa (LIS) en TAP Air Portugal

FECHA: 02 – 10 – 2022

RUTA: MAD – LIS

VUELO: TAP 1025

ASIENTO: 27F

NAVE: Embraer 190

Organicé un viaje a Europa este octubre pasado y pensé que debía hacer buen uso de todos mis días, conocer la mayor cantidad de destinos y exprimir la Schengen por todo lo que vale. Por ello, aparte de España, hice una escapada rápida a Lisboa. Esta era mi primera vez en Portugal, por lo que en verdad estaba entusiasmado. Hice el viaje, de apenas una hora, entre capitales en TAP Air Portugal, la aerolínea bandera de este país. Así fue mi trayecto.

El vuelo salía a lo que caía la noche y fui en el Renfe de cercanías, desde el centro de Madrid, hasta el aeropuerto. El trayecto tan solo cuesta 2,60 € pero llega a la T4, la terminal más alejada de Barajas. Hay que tomar un bus hasta la T2, desde donde opera TAP. El recorrido es un poco demorado y encima llega al área de arribos, por lo que toca subir dos escaleras hasta la parte de facturación. Este espacio del aeropuerto es bastante más antiguo y, al momento que llegué, estaba caótico, con decenas de vuelos despegando en un período corto.

Llegué a la puerta de embarque a lo que empezaba el abordaje. En este caso me tocó en el primer grupo. Increíblemente, está era mi primera vez volando en un Embraer 190. Me gusta que apenas tenga dos asientos por fila y está ok para rutas cortas como esta. El legroom es algo estrecho, pero se reclina, lo que no me esperaba. Estuve en un asiento de ventana, en la penúltima fila. Por la tarifa que pagué (que incluyó una mochila y un carry on) no me quejo.

La cabina no tiene ningún tipo de entretenimiento a bordo, ni siquiera revista, aunque curiosamente cuenta con Air Mall. El vuelo fue lleno al 100%.

El abordaje fue relativamente rápido y salimos unos pocos minutos tarde. Como apenas caía la noche fue agradable ver el anochecer ibérico desde los cielos. Aparte de esto no hay mucho más que decir. La llegada fue con la hora y el desembargue, nuevamente, fue por escalera. El avión se estacionó cerca de la puerta de ingreso de arribos, por lo que no hizo falta tomar un autobús para llegar a esta área.

Era mi primera vez en el aeropuerto de Lisboa y una cosa que me encantó de esta terminal aérea es que no está tan alejada de la ciudad y está conectada con el metro, lo que me facilitó el trayecto al hotel notablemente. Encima, la parada del metro cerca de mi hospedaje estaba en la misma línea, por lo que no tuve que hacer ningún trasbordo.

Para ser un vuelo tan rápido, no tengo muchos comentarios con respecto a TAP. Es adecuada y cumple con el objetivo. Similar a hacer este trayecto en una low cost, pero eso era de esperarse. Sin más, me parece que hacer cualquiera viaje en la aerolínea bandera del país al que llegas siempre da un plus y por el precio que pagué (básicamente solo eran impuestos) está bien.

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